Comida
Plato principal
Dificultad
Fácil
Duración
20 min
Ingredientes
- 500 g de espinaca
- Mantequilla y aceite de oliva
- 3 cebolletas frescas cortadas en finas rodajas
- 125 g de nata fresca
- Nuez moscada rallada
- Sal y pimienta
- Pechuga de pollo
- Huevos
Paso a Paso
Poner agua a hervir.
Añadirle sal e introducir las espinacas en el agua. Escaldarlas durante medio minuto, manteniéndolas en el agua hirviente. Mientras escaldamos las espinacas poner un bol con agua y hielos.
Una vez escaldadas las espinacas, escurrirlas y refrescarlas en agua con hielos para fijar el color.
Ya frías, escurrir y cortar finamente sobre una tabla, con un cuchillo afilado.
Calentar el aceite en una sartén y dejar sofreír la cebolleta fresca empapada en aceite durante 3 minutos hasta que quede bien pochada.
Agregar las espinacas, la nata fresca y la nuez moscada a la cebolleta pochada. Sazonar.
Acabado y presentación
Llevar a ebullición y después dejar 3 minutos a fuego suave antes de servir.
Si se quiere, en el último momento, podemos cascar unos huevos sobre la espinaca y dejar que cuajen con la tapa puesta y el fuego apagado, el calor residual terminará de hacerlos.
A la hora de servir, volver a rallar un poco de nuez moscada y pimienta por encima.
Saltear en una pequeña sartén, rápidamente, la pechuga de pollo salpimentada por los dos lados, cortarla en tiras y servirla sobre las espinacas.