La sopa fría de remolacha es una forma deliciosa de recordar los días cálidos de finales de primavera y verano. Promete un alivio refrescante del calor estival y es un plato que siempre cumple.

La remolacha le da un bonito tono rosado, y el cilantro le añade un sabor encantador. Esta sopa puede servirse fría, por lo que es perfecta para una comida o cena ligera.

Siempre que tengas a mano los ingredientes adecuados y una batidora, preparar esta sopa será pan comido. Puedes utilizar el juego de batidora de mano Beko para que le resulte más fácil.

Paso a paso:

1. Poner la remolacha en una olla con 500 ml de agua, llevar a ebullición. Hervir durante 25 minutos. Escurrir, llevar a una licuadora con yogur, agua fría y ajo. Licuar hasta obtener una textura suave. Reservar.
   
   
2. Cortar el pepino, el calabacín y el pimiento en dados medianos.
   
   
3. En un bol mezclar la mezcla de remolacha, verduras picadas, freekeh bulgur sal y pimienta.
   
   
4. Verter en dos cuencos y servir con cebollino y cilantro picados. ¡Que aproveche!